El contraste de fases. El contraste de fases es una técnica utilizada en microscopía para el estudio de muestras delgadas, transparentes y de poco contraste. Esta técnica explota los cambios en el índice de refracción o diferencias de camino óptico, convirtiéndolos en cambios de amplitud que pueden ser observados como diferencias de contraste en la imagen.
En la microscopía de contraste de fases, la luz proveniente de la fuente de iluminación atraviesa el lente colector y es dirigida hacia un anillo especializado ubicado en el condensador, el cual genera un cono de luz vacío que ilumina la muestra. Posteriormente, los rayos difractados y no difractados son colectados por el objetivo y se proyectan hacia una placa de fase, ubicada en el plano focal posterior de éste. Esta placa contiene un anillo grabado en el vidrio, recubierto con una película metálica parcialmente absorbente, la cual permite alterar selectivamente la fase y la amplitud de la onda no alterada, para que, al llegar al plano intermedio de la imagen, pueda interferir constructiva o destructivamente con la luz difractada por la muestra, modificando así la amplitud de la onda resultante y generando contraste.
Halos y Shade-off. Sin embargo, las imágenes de contraste de fases suelen presentar artefactos o distorsiones, conocidos como halos y Shade-off, los cuales no corresponden a diferencias de camino óptico como tal. Estos efectos pueden tener ventajas y/o desventajas, y existen formas de reducirlos, como el uso de medios con índices de refracción altos o el uso de objetivos especialmente diseñados.